¿Un Nuevo Año de Deseos o de Logros?
Imágen de www.manzanasweet.blogspot.com |
Ya sea que nuestros deseos sean “Prosperidad”, “Salud”, o cosas más específicas como las que se nombraron al principio, el reflexionar sobre esto forma parte casi implícita de la tradición navideña. Desafortunadamente, es común que el no cumplirlas también se haga parte de esa tradición. Estas son algunas recomendaciones para ayudar a convertir esos deseos en una realidad. ¿Tú que prefieres: Deseos o logros?
Tal como lo hablamos en “Una Meta sin un Plan es tan sólo un Deseo”, no sólo es cuestión de anhelo sino de Logro. La “suerte”, el “destino”, la “casualidad” o como queramos llamarlo, sólo puede ayudarnos hasta cierto punto y ciertamente no podemos depender de ello para todo lo que queremos alcanzar. Si bien es cierto que muchas veces necesitamos que se presente la oportunidad para poder actuar, también es necesario que empleemos nuestro esfuerzo para que esas oportunidades puedan entrar a nuestras vidas.
Cambia la palabra Deseo o Resolución por “Plan”. Un simple cambio de palabras puede ayudar a cambiar tu manera de pensar y además puede animarte para lograrlo.
Reduce tu plazo. Debido al hecho de que creamos nuestros planes de nuevo año teniendo 12 (aparentemente largos) meses para cumplirlos, la mayoría de nosotros piensa que tenemos tiempo suficiente y comenzamos a procrastinar desde un principio. Una forma de combatir esto es reducir este plazo, “Comenzaré a tocar la guitarra estos primeros tres meses”, “Haré planes para comprar mi carro dentro de los próximos seis meses”. Dependiendo de nuestros recursos y en la medida de nuestras posibilidades.
Sé Específico. Una manera de ayudar a hacer tus deseos realidad es hacer que dependan de tí. No solamente desees prosperidad sino un aumento en tu trabajo o una mejor oportunidad de empleo, y en lugar de sentarte a esperar que suceda puedes optar por hablar con tu jefe sobre adquirir más responsabilidades y discutir un posible aumento, o no sólo revisar las ofertas de trabajo en el periódico sino hablar de ello con tus amigos, revisar páginas de internet o elegir un trabajo que, aunque no sea ideal, pueda ayudarte a avanzar o a adquirir experiencia.
Pregúntate Por Qué. Hacer algo que realmente no queremos por una simple obligación puede reducir considerablemente nuestra eficiencia. Cuando sientas ganas de posponer tu plan, de simplemente “dejarlo para luego”, reflexiona acerca de por qué lo estás haciendo, de qué manera puede beneficiarte y, por sobre todo, de qué manera esto te hará feliz una vez que lo hayas logrado. Si a mitad de año te das cuenta que tu plan ha cambiado o que ahora quieres algo más, siéntete libre de hacerlo.
Estas recomendaciones, sencillas, cortas y concisas pueden ayudar a aumentar tus logros del año y al final de este podrás mirar atrás con una sonrisa y un buen sabor en los labios. ¿Qué piensas de estas sugerencias? ¿Cuáles son tus metas para este nuevo año? ¿Estás repitiendo alguna del año anterior? (sé que yo sí)
0 comentarios: